CAYÓ LA BANDA DE ENERGÚMENOS QUE SE HACÍAN PASAR POR POLICÍAS PARA EXTORSIONAR A SUS VICTIMAS

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Tenían una aceitada ingeniería social con la cual, primero le hacían creer a las víctimas en su mayoría hombres, que contactaban con mujeres, solicitando fotografías íntimas para iniciar una relación, en su mayoría en plataformas de citas. Veinticuatro horas después llamaban haciéndose pasar por policías aduciendo que habían chateado con mujeres menores de edad y los asustaban con amenazas de pesadas causas penales; para luego pasar a la extorción.

Según relataron las víctimas, todos habían compartido imágenes con estas mujeres y habían intercambiado sus números telefónicos. Luego, comenzaron a recibir llamados de un sujeto que decía ser un oficial de la División de Trata de Personas de la PFA. Este execrable sujeto les aseguraba que tenían sus celulares intervenidos en el marco de una supuesta causa vinculada a hechos de pedofilia y prostitución, por lo que les exigía dinero a cambio de quedar desvinculados de la investigación. Desde ya, todo era falso.

Los policías “truchos” que contactaban a víctimas por Tinder y exigían dinero para salvarlos de una causa por pedofilia operaban en Lomas de Zamora. Fueron allanados y arrestados por la Policía Bonaerense. De acuerdo a fuentes del caso, la investigación comenzó una vez que se registraron varias denuncias similares. Varios hombres alegaban que habían comenzado a ser extorsionados luego de haber mantenido conversaciones con mujeres a través de las plataformas de Tinder, Badoo, Happn, Instagram y Facebook.

Según consigna INFOBAE, tras recibir las denuncias, el fiscal Daniel Semisa, de la UFI N°4 de Esteban Echeverría, convocó a la Dirección de Investigaciones de Delitos Económicos del área de Delitos Complejos de la Bonaerense. Los detectives lograron identificar a los presuntos responsables y recolectaron las pruebas suficientes para solicitar las órdenes de allanamiento al juez Javier Mafucci Moore.

En total se realizaron seis allanamientos: tres en Lomas de Zamora, dos en Domselaar y uno en La Plata, en los que los oficiales lograron dar con los responsables. De esta manera, fueron detenidos Lucas Ezequiel Martínez, de 28 años, quien se encuentra alojado en la U.C. N°1 de Lisandro Olmos; y Sabrina Florencia Pereyra, de 37 años. Además, fueron aprehendidos Estefanía Solange Godoy, de 32; Osvaldo Martínez, de 58; y Jorge Gabriel Vázquez, de 31. Les secuestraron 13 celulares, anotaciones manuscritas, 108 chips de teléfonos celulares, 1 notebook, 2 armas blancas, 1 cable de acero y 5 tarjetas bancarias.

En total se realizaron seis allanamientos: tres en Lomas de Zamora, dos en Domselaar y uno en La Plata, en los que los oficiales lograron dar con los responsables. De esta manera, fueron detenidos Lucas Ezequiel Martínez, de 28 años, quien se encuentra alojado en la U.C. N°1 de Lisandro Olmos; y Sabrina Florencia Pereyra, de 37 años. Además, fueron aprehendidos Estefanía Solange Godoy, de 32; Osvaldo Martínez, de 58; y Jorge Gabriel Vázquez, de 31. Les secuestraron 13 celulares, anotaciones manuscritas, 108 chips de teléfonos celulares, 1 notebook, 2 armas blancas, 1 cable de acero y 5 tarjetas bancarias.

También hubo innumerables casos en todo el país e incluso en Salta

En Salta hubo muchas denuncias de hombres que sufrieron el mismo tratamiento por parte de esta banda y de otras que operaban desde las cárceles, en su mayoría en Buenos Aires. Desde allí utilizaban la misma ingeniería social, con idénticos pasos.

Las victimas sin saberlo contactaban al supuesto contacto, quien contaba con un perfil falso en Facebook. Al día siguiente y ya con el número de Whatsapp enviaban las fotografías intimas que la víctima le había enviado a la supuesto mujer, que a la postre, según los falsos policías “eran menores”, por lo que se les venía encima una denuncia por pedofilia.

Varios estudios de abogados que se especializan en Derecho Penal relataron a MUY CRITICO que el año pasado hubo cientos de casos de hombres desesperados que ante el miedo de caer en una causa penal por pedofilia y/o corrupción de menores, eran extorsionados durante meses.

Obvio que de estos desafortunados acontecimientos la fiscalía penal especializada en Ciberdelincuencia ni se enteró de estos hechos.