Fue el único juez que emitió un fallo de absolución lisa y llana para Vilte y Vera. “Cada vez que pasa el tiempo, más me confirmo que ellos dos son inocentes y me causa dolor que un inocente esté condenado a prisión perpetua”, dijo el magistrado la última vez que fue noticia, cuando se conoció el controversial documental del barbárico crimen de las turistas francesas. A cinco años de su partida MUY CRITICO rinde homenaje al ejemplar magistrado.
Muchos de los actuales funcionarios del Poder Judicial y el Ministerio Público deberían seguir el ejemplo del intachable juez Carlos Héctor Pucheta. El magistrado trascendió a su profesión y se ha convertido en un emblema de la justicia independiente.
Tras el escandaloso rechazo del jury de enjuiciamiento contra los jueces Rubén Arias Nallar y Luciano Martini, la justicia salteña ha quedado en evidencia ante el mundo una vez mas al tapar y apañar a poderosos que estuvieron involucrado en el doble crimen de Cassandre Bouvier y Houria Moumni, encontradas el 29 de julio de 2011 en la Quebrada de San Lorenzo.
Pero resulta que no todos los funcionarios que actuaron en este trágico proceso que incluyó el encarcelamiento de dos perejiles, son energúmenos.
Aquel “tridente” compuesto por Carlos Héctor Pucheta, Ángel Longarte y Bernardo Ruiz, sorprendió a propios y extraños, ya que el famoso juicio conocido como “el doble homicidio de las turistas francesas” estuvo teñido de suspicacias desde la etapa de instrucción a cargo del incalificable juez Martin Perez.
En los fundamentos del fallo que condenó a Gustavo Lasi y absolvió a Vilte y Vera, el doctor Carlos Pucheta, miembro del Tribunal, cuestionó la labor del juez de instrucción, Martin Pérez, quien investigó la causa y las torturas policiales denunciadas por acusados y testigos.
En la foja 460, se hace mención a los informes psiquiátricos y psicológicos practicados en los imputados. “Es de justicia hacer una mención a dichos informes, puesto que el Instructor (en relación al Juez Pérez) de un modo parcial y carente de toda objetividad […] transcribió casi en su totalidad lo que manifestaron los peritos (en los casos de Vilte y Vera) en tanto que para Gustavo Orlando Lasi, solamente le asignó tres renglones y medio”, consigna Pucheta.
Por su parte al vocal le “resulta llamativo” que el Juez Martín Pérez haya convocado a su despacho a los peritos psicólogos en el marco de la investigación y con anterioridad a la elaboración de los informes.
Un juicio que demostró que la independencia de poderes era posible
El 2 de junio de 2014, La Sala II del Tribunal de Juicio, compuesto por los jueces Longarte, Ruiz y Pucheta, condenó a Gustavo Lasi a la pena de 30 años de prisión y liberó por el beneficio de la duda a Daniel Octavio Vilte y Santos Clemente Vera.
Después de esta actuación soberbia, donde el tribunal no solo tuvo que corregir todo lo mal hecho durante la etapa de instrucción, sino que dictaminó que dos inocentes debían irse a sus casas y no al infernal penal de Villa Las Rosas, la sociedad salteña sintió por primera vez en la historia judicial local que se había hecho justicia y que no se condenarían a dos perejiles.
Lamentablemente todo ese halo de justicia y la sensación de que la independencia de poderes no era un idilio, el 4 de febrero de 2016, la Sala III del Tribunal de Casación a cargo de los jueces Rubén Eduardo Arias Nallar y Luciano Martini resolvió revocar aquel fallo y condenar a prisión perpetua a Gustavo Orlando Lasi y a Santos Clemente Vera, por el doble homicidio de las turistas francesas Cassandre Bouvier y Houria Moumni.
Aun así, el valiente juez, ya jubilado, al ser consultado por la situación de Santos Clemente Vera, no dudó un segundo en admitir la terrible realidad de que el gaucho de San Lorenzo no debería estar en reclusión perpetua con el máximo de la pena. Incluso aceptó aparecer en el controversial documental y aceptar que la Justicia salteña tiene a un inocente en prisión.
Mirá quienes critican
Según una nota publicada en NOTICIAS IRUYA, el doctor Pucheta suscribió un valiente voto particular, en el que se pronunció de forma muy decidida por la absolución lisa y llana de los acusados Daniel Vilte Laxi y Santos Clemente Vera, por entender que ninguno de los dos había participado en el hecho criminal enjuiciado.
Pucheta discrepaba así con sus colegas Ángel Amadeo Longarte y Bernardo Ruiz, quienes se inclinaron por aplicar a los mismos acusados el beneficio de la duda para terminar absolviéndolos.
Tras el receso judicial de invierno de aquel mismo año, el doctor Pucheta se jubiló dejando tras de sí una larga y sólida carrera signada por la vivaz defensa de los derechos fundamentales de las personas, especialmente los de aquellas sometidas a proceso penal.
Un año y medio después de su retiro, la figura de Pucheta ha vuelto a llamar la atención, pero esta vez por unas descalificadoras líneas escritas por los magistrados Luciano Martini y Rubén Eduardo Arias, quienes, al revisar en casación la sentencia de la Sala II del Tribunal de Juicio de Salta, que Pucheta integró con encomiable dignidad, insinuaron que el voto exculpatorio emitido en su día por el juez hoy jubilado estuvo basado en criterios reñidos con la ciencia y probablemente emparentados con el curanderismo.