Las mujeres han sido grandes protagonistas del cine de Hollywood desde sus inicios. Talentosos directores como Ridley Scott, Steven Soderbergh o Clint Eastwood han creado películas de culto donde sus historias son contadas con sagacidad, dinámica y ternura. Lo que sigue es el ranquing de lo que MUY CRITICO considera como las mejores películas de mujeres de todos los tiempos.
5- Norma Rae (1979)
Quizás la imagen más icónica que Hollywood la utiliza en sus homenajes a mujeres en la entrega de los Oscars sea esa en que Sally Field sostiene el cartel con la palabra “Unión”.
En esta historia de lucha sindical, la protagonista, Norma Rae es una madre que vive con sus padres y trabaja, al igual que ellos, en la fábrica textil del pueblo. Las condiciones de los trabajadores de la fábrica son muy malas, por lo que un sindicalista de Nueva York, Ruben Warshosky acude a la fábrica para convencer a los trabajadores acerca de la importancia de crear un comité de empresa.
Norma Rae será quien más confíe en él y empieza a luchar por los derechos laborales, lo que es no sólo justo, sino, además, posible y necesario. Con muchas dificultades y con la ayuda de Rubén logra fundar en la fábrica un sindicato y con ello encuentra un sentido a su vida, hasta entonces vulgar y hasta despreciable.
4- Erin Brockovich (2000)
Cuando le entregaron el Oscar a Julia Robert por esta épica de Steven Soderbergh, la crítica salió a decir que solo le habían dado el premio de la Academia “por linda”, pero cuan equivocados estaban. Se necesitaba justamente una “linda”, ya que la verdadera Erin antes de ingresar a la firma de abogados y hacer historia, había sido reina de belleza.
Erin Brockovich es una madre soltera que consigue trabajo como secretaria en un pequeño despacho de abogados. Revisando unos expedientes clínicos de unos clientes que padecen una sospechosa enfermedad, Erin descubre que una multinacional energética es la culpable y emprende una batalla contra ella.
3- Million Dollar Baby (2004)
Para muchos la mejor película de Clint Eastwood; para otros demasiado dramática y para la mayoría una película de culto. Hilary Swank, de tremenda interpretación da vida a Maggie Fitzgerald, una chica con problemas familiares, quien decide ir tras el sueño de ser campeona de boxeo.
Al llegar al gimnasio de Frankie Dunn (Clint Eastwood) se encuentra con un cascarrabias que lo maneja junto a otro ex boxeador que perdió un ojo, interpretado por Morgan Freeman.
El film atraviesa el derrotero de Maggie en ese mundo sudoroso y doloroso, donde los hombres son los que llevan la delantera y ella solo es alguien “pasada en años” para lograrlo.
Están presentes el amor de un hombre que actúa como un padre y el polémico tema de la muerte digna. Una obra maestra monumental, de esas para llorar a los gritos después de que comienzan a aparecer los créditos del final.
2- Three Billboards Outside Ebbing, Missouri (2017)
Sin dudas la lucha de una madre contra todo el arraigo de un pueblo conservador y machista del sur de EE. UU. está sintetizada en esta épica que debería haberse llevado el Oscar a Mejor película del año.
Afortunadamente la Academia premió a Frances McDormand en su increíble interpretación de Mildred Hayes; y también a Sam Rockwell, como el irascible y violento policía, Jason Dixon, quien es el principal escollo en la cruzada que esta madre lleva sin concesiones.
Mildred ha sufrido la violación y muerte de su hija, mientras la policía local no hace más que torturar a hombres negros y no investigar nada acerca del crimen.
Ante esto la protagonista contrata tres carteles afuera del pueblo y escribe misivas dirigidas al jede de la policía del pueblo, quien padece cáncer y es considerado un buen hombre, pero que ante la falta de evidencia no puede dar con el responsable.
Las situaciones propias de un pueblo de sureños racistas y recalcitrantes conservadores como los de la ciudad de Salta y la policía local, son las principales dificultades que valiente ésta madre deberá enfrentar hasta un punto de iniciar una guerra personal.
Esta es una de las películas más grandes que se realizaron desde el nuevo milenio y son de esos films que dejan huella en quien las ha visto. Un film de culto, una lección de vida y lucha inquebrantable.
1- Thelma & Louise (1991)
Lo realmente curioso de ésta “roadmovie” es que ninguna de sus protagonistas eran conocidas en el mundo hasta el estreno del film. Tanto Geena Davis como Susan Sarandon no habían pasado de películas donde solo se explotaban sus dotes estéticos.
Ambas chicas arrastran historia de matrimonios fracasados, maridos insufribles y una de ellas incluso carga con un abuso sexual. Pero como la vida jamás se detiene ambas deciden, un fin de semana, evadirse de sus rutinas en Arkansas e ir en el coche de Louise a una casa en la montaña, pero sus planes sufren un giro inesperado que acaba convirtiéndolas en dos símbolos del cine contra la violencia machista.
Desde la fecha de estreno hasta la actualidad, esta es una cinta que se deja ver una y otra vez. La transformación de ambas mujeres durante el desarrollo del guion es notable. Su director Ridley Scott le imprime a la historia toda la dinámica de un thriller, con toques de comedia negra y hasta gags contra los machistas, lo cual eleva el film hasta la categoría de culto.
Gorilas en la niebla (1988) -Bonus track-
Como no podía faltar y fiel al estilo de MUY CRITICO, presentamos una película que en intensidad y magnificencia no es más que otra cinta de culto. Sería casi una herejía no incluir a “Gorilas en la niebla” (1988) en este conteo.
Michael Apted dirige esta conmovedora historia basada en hechos reales. Se trata nada más ni nada menos que de Dian Fossey, una zoóloga estadounidense reconocida por su labor científica y conservacionista con los gorilas de las montañas Virunga, en Ruanda y la República Democrática del Congo.
Será la magnífica Sigourney Weaver quien deba meterse en la piel de esta verdadera heroína. Con mucho de la teniente “Ellen Ripley” lleva su lucha hasta el extremo de ofrendar su propia vida con tal de salvar a estos inocentes animales.
Cada vez más horrorizada por la caza furtiva de los gorilas por sus pieles, manos y cabezas, Fossey se queja ante el gobierno ruandés, que la despide afirmando que la caza furtiva es el único medio por el que algunos de los nativos ruandeses pueden sobrevivir. Así comienza una lucha quijotesca y una cruzada contra todo un sistema perverso.
