El exfuncioinario del gobierno de Cristina Kirchner estará acompañado de María Luz Alonso, en la tarea de “poner orden” en el justicialismo salteño. Evidentemente el argentino de a pie es alguien que fácilmente olvida las nefastas acciones de ciertos personajes de la vida política en un país sin memoria.
El 18 de enero de 2015 es una fecha que para un peronista no significa absolutamente nada, pero para el resto del país es el día en que asesinaron a la verdad. Ese día algo se quebró en la Argentina, ese día literalmente mandaron a matar un fiscal para tapar la estremecedora impunidad en la que se vivía.
Ese día Sergio Berni recibió una treintena de llamadas telefónicas de su jefa, la por entonces presidenta de la nación, Cristina Fernández de Kirchner. Ese día junto a Viviana Fein, la infame fiscal que “chancleteó” la sangre de Alberto Nisman en el departamento ubicado en el complejo Torres Le Parc, en el barrio porteño de Puerto Madero, el por entonces flamante secretario de Seguridad de la Nación, se presentó con la inconfesa idea de limpiar la perversa escena del crimen, asegurase de que nadie supiera que en las últimas 20 horas habían despejado la zona para que los asesinos actuaran sin ningún tipo de molestias y que el magnicidio se llevara a cabo sin errores.
Mientras el equipo propagandístico oficial ya tenía el equipo de prensa listo para que el perverso editor de Página 12 titulara con la ambigua pregunta “¿Qué lo llevó a quitarse la vida?”. En esa revolcada inmunda estuvo un obediente Berni, al servicio de su majestad.
El día que le dieron como bacalao en semana santa por “intervenir” en un corte de ruta
El 3 de abril de 2023, Berni volvió a ser noticia y no precisamente por la pulcritud de sus “intervenciones”. Parece ser que ese verbo maldito lo persigue junto a la perversidad de acciones o imágenes que quedan grabadas en el inconsciente colectivo para siempre.
Aquel día en que habían asesinado a un chofer de colectivo de la línea 620, sus compañeros hartos de la inseguridad y dolidos por la muerte de la víctima, sobre la ruta 3 estaban realizando aquella manifestación y Berni apareció en su acting de sheriff duro.
Como consecuencia de su “intervención” le dieron para que tenga y guarde. Ese día Sergio Berni irrumpió en escena y lo agarraron a piñas, patadas y palazos, quedando bañado en sangre y al borde del desmayo. Según él, por una “interna de UTA”, o por una “emboscada”, o porque el “ministro de la ciudad lo secuestró”, en referencia al operativo de una fuerza que no estaba bajo su mando, y que era responsable de lo que ocurrió en el lugar adonde Berni fue a provocar a los compañeros del chofer asesinado, que realizaban el corte.
Está lejos de casa soldado
Aunque desarrolló casi toda su actividad profesional en el sur de Argentina, y se suele creer que tiene allí sus orígenes, Sergio Berni nació en Capilla del Señor, localidad cabecera del partido de Exaltación de la Cruz, en la provincia de Buenos Aires. Es decir que esta nota de opinión puede afirmar que tenemos otro porteño por Salta haciendo política, en aquella eterna pregunta que nadie se hace con respecto al porqué de que un foráneo como Darío Madile siga dirigiendo el Concejo Deliberante de Salta. Confirmado por otro largo periodo más a pesar de los papelones que allí se suceden una y otra vez, con amenazas de bajas de dientes, cantores que cantan en pleno recinto y toda clase de cotilleo desvergonzado entre concejales libertarios y peronistas que nada le aportan al vecino que los votó.
Nadie parece recurrir a esa frase de películas bélicas yanquis cuando el protagonista ha caído prisionero tras líneas enemigas y el general de los rusos o quien sea el enemigo ocasional de los gringos le dice: “Esta lejos de casa soldado”.
Pues bien, Sergio Berni una vez más a las órdenes de Cristina Kirchner aterrizará por Salta para “intervenir” el PJ salteño por la simple y sencilla razón que a la jefa no le cae en gracia que los diputados nacionales por Salta voten por los antojos de Milei; cuando se sabe que si no lo hacen se termina la coparticipación y los fondos para las obras públicas; lo que llevará a que en Salta no quede un centavo para pagar los sueldos de la administración pública, y la provincia entera se prenda fuego.
Quiera Dios que el karma de la intervencion de Berni al PJ de Salta no tengan muertos que al otro día se “suicidaron” o palizas en plena vía publica, porque lamentablemente para sujetos como Berni, el universo suele a tender al equilibrio y aquí todas se pagan porque como la lógica popular clama: “A cada chancho le toca su San Martin”.
Bonus track
El 19 de diciembre de 2024 el fiscal Eduardo Taiano imputó al exsecretario de seguridad del kirchnerismo Sergio Berni y a su entonces colaborador Dario Ruiz por la falta de conservación de la escena del crimen donde fue encontrado muerto el fiscal federal Alberto Nisman, el 18 de enero de 2015.
La imputación de Taiano ahora deberá traducirse en una citación que realice el juez Julián Ercolini a ambos exfuncionarios para informarle sobre esta causa penal y para que, eventualmente, designen abogados defensores.
