Los asesinatos y violaciones de Cassandre Bouvier y Houria Moumni continúan impunes y el padre de una de las victimas sigue exigiendo justicia. En tanto el Poder Judicial de Salta ha dilatado por 13 años una causa que le trajo más dolores de cabeza y bochornos internacionales, que una salida “elegante” a semejante horror perpetrado en la Quebrada de San Lorenzo, a escasos kilómetros de la ciudad de Salta. ¿Hasta cuándo la casta judicial va a proteger a los verdaderos asesinos?
El corrupto poder enquistado en la casta judicial de Salta creyó que Jean Michel Bouvier no iba a rendirse. Pero el padre de Cassandre resultó ser más fuerte de lo que creyeron. Aquejado por una cruenta enfermedad y a sabiendas de que ya no es un hombre joven, tiene la inquebrantable idea de cargarse a todo el Poder Judicial de Salta hasta las últimas consecuencias y en la volteada quizás le toque bailar con la más fea a Juan Manuel Urtubey.
A lo largo de 13 años tuvo que soportar que corruptos como el juez Martin Pérez, caminen por los pasillos de Ciudad judicial como si nada pasara. Que policías de la Brigada de Investigaciones que torturaron a los perejiles que habían detenido por orden del poder de turno por entonces, los golpearon por turnos y los incriminaran en un hecho que no tuvieron nada que ver. A pesar de que el ADN de Gustavo Lasi está presente en las victimas. Quizás sea un necrófilo o no, algún día se sabrá la verdad.
También tuvo que soportar que el corrupto del comisario Walter Mamani, tras plantar casquillos en la escena de la aparición de las víctimas, (mandado por Martin Pérez obviamente) mintiera descaradamente y que durante el juicio no haya sido ni señalado por desviar la investigación para el lado de lo que pretendía el juez de instrucción (IPP) en ese momento.
Además de soportar ver como encarcelaban a un inocente durante años, cortesía de los jueces Luciano Martini y Rubén Arias Nallar, de la Sala III del Tribunal de Impugnación, tras la presentación de un recurso de casación en 2016 del fiscal Federico Obeid.
En 2017, la Corte Salteña –o sea la casta judicial– rechazó un recurso extraordinario de la defensa de Santos Clemente Vera, y el 7 de diciembre de 2023, ante un recurso de queja interpuesto por Manuel Garrido, abogado que preside la organización internacional Innocence Project en Argentina, la Corte Suprema de Justicia de la Nación ordenó la inmediata liberación de Vera.
Urtubey: el hombre que lo sabía todo
Lamentablemente los poderes Judicial y Ejecutivo tienen un nexo perverso. Es imposible pensar que el Poder Judicial va a tomar una decisión con independencia si los sueldos y las designaciones de los magistrados dependen del Ejecutivo, es decir del gobernador. Entonces es ilógico creer que cuando mataron a Cassandre Bouvier y Houria Moumni, el Ejecutivo de entonces ignoraba lo que sucedió en la Quebrada de San Lorenzo.
Juan Manuel Urtubey era el flamante gobernador de Salta, elegido en tres oportunidades. En 2007 fue gobernador por primera vez. Luego fue reelegido de manera consecutiva en los años 2011 y 2015, por alrededor del 57% y el 51%. “A no quejarse” diría una sabia vieja del campo pero lamentablemente el votante salteño no tiene memoria.
Dicho esto entonces no queda otra conclusión que deducir que Urtubey, a quien Bouvier quiere frente a un tribunal en el nuevo juicio, tiene que dar muchas explicaciones.
Para comenzar la enigmática muerte del comisario Néstor Piccolo; el conveniente encarcelamiento de Santos Clemente Vera; los más de 15 policías torturadores de la Brigada que jamás fueron a juicio –incluye uno pariente de un alto funcionario judicial–; los años que padeció en la cárcel Daniel Vilte, el otro perejil que salvó Marcelo Arancibia; y sobre todo la data de muerte de las turistas francesas que no cierra ante cualquier análisis técnico medianamente lógico. Ningún cuerpo puede permanecer 14 días en la intemperie y no presentar un estado de descomposición.
Obvio que las preguntas a Urtubey siguen y siguen pero tendría que responderlas en sede judicial, tal como lo exige el padre de una de Cassandre.
¿Tendrá las agallas para dar a conocer los hechos o solo se limitará a responder con entelequias tal como lo hizo López Sastre durante el juicio ante las insulsas preguntas del fiscal Félix Elías en aquel ya lejano 2011?