Emiliano Durand se refirió a la nefasta herencia que dejó su antecesora en el ejecutivo municipal. Las declaraciones fueron vertidas a la prensa previo a participar de los actos de un nuevo aniversario de la fundación de la ciudad de Salta, cuando el intendente capitalino pidió hacer un esfuerzo conjunto para sacar adelante al municipio.
Dicen que cada pueblo tiene los gobernantes que se merece pero el aterrizaje de Bettina al frente del ejecutivo municipal fue la tormenta perfecta. La familia más poderosa de Salta, tanto en lo económico como en lo político se estaba quedando sin representación en el ejecutivo.
El plan de Juan Carlos seguramente fue darle a su hija la oportunidad de jugar el “Nacional B” por dos administraciones en la Muni y una vez que el electorado se haya acostumbrado a la imagen de la “mujer salteña”, aparecería la primera gobernadora de la historia de la provincia. Pero como no siempre las cosas salen como se planean, apareció un candidato del saensismo y los planes de los Romero se fueron por la alcantarilla.
En el acto por los 442 años de Salta el intendente apuntó contra la gestión de Bettina Romero, que según dijo, hundió a la ciudad en “la decadencia”. En contrapartida a eso el jefe comunal destacó el progreso realizado desde que asumió el cargo el pasado 10 de diciembre “para levantar la municipalidad”, que estaba en una situación financiera crítica.
