En plena sesión, Roque Cornejo cuestionó la gratuidad del boleto en Salta, argumentando que los salteños igualmente pagan el servicio a través de sus impuestos. “Nada es gratis. Eso fue parte de la batalla cultural que dio Milei”, afirmó.
Miles de salteños que no tienen la posibilidad de acceder a este beneficio se quedarían sin la posibilidad de contar con el pase gratuito para estudiantes solo porque a Roque Cornejo se le ocurre elucubrar en su atormentada mente de derecha que “nada es gratis”, al tiempo que se pregunta: “¿por qué uno va a tener subsidios como Saeta, y los otros no?”.
En realidad Cornejo tiene la inconfesa idea de hacer desaparecer del mapa a Saeta. En más de una oportunidad lo ha expresado. “Y además hablan de boletos gratuitos. De jubilados, de estudiantes y de personas con discapacidad acompañante. Eso es mentira”, gritó en la Cámara. El plan en realidad obedece a quitar el subsidio a las grandes empresas de Salta.
En este punto habló sobre el mal llamado boleto gratuito, ya que asegura que los salteños pagan de su bolsillo el subsidio a SAETA. Entonces plantó la idea de terminar con eso, poniéndole fin a la gratuidad, como aseguraron varios medios locales.
“Todo eso se paga con 96 mil millones de pesos. Te pongo mi ejemplo testigo. Las personas con discapacidad que tienen el boleto. No es cierto que dicen que no pagan, pero sí lo pagan”, disparó el libertario de extrema derecha.
“La Secretaría de Discapacidad e Inclusión tiene un presupuesto de 6 mil millones de pesos. 5 mil millones de pesos se van a SAETA”, remarcó Cornejo. El periodista le consultó si creía que los discapacitados debían pagar el boleto. A lo que Cornejo afirmó que sí lo pagan.
“Sí lo pagan. Si lo pagan de forma directa, vos pagas el impuesto. No, van a tener impuestos, porque le hiciste un impuesto alternativo. Bueno, pero eso es una sensación que está instalada en la gente de que no, no estoy pagando. Por eso es que salta la cuarta Provincia como la prestación tributaria de la República Argentina”, dijo.
Evidentemente los libertarios como Cornejo, lo único que desean es no pagar más impuestos y volver al Estado observador del siglo XIX.
Charles Dickens denunciaba eso en su obra, el clásico Cuento de Navidad. Allí la ideología liberal entre otras cosas le echa la culpa a los más vulnerables de situación y no al sistema. Porque claro ellos hacen fortuna con la asimetría capitalista.
Muchos de ellos sostenían que al pobre no había que subsidiarlo ni ayudarlo porque reproducían la miseria y que era mejor que murieran.
