Lo dijo la concejal Agustina Álvarez Eichele, durante la sesión extraordinaria para tratar la renuncia y sanciones disciplinarias a Pablo López. “No puedo creer que una vez más en vez de estar hablando de las cuestiones que le preocupan a los salteños estamos hablando de otro escándalo”, lamentó la edil del PRO
En una de las alocuciones más coherentes que se escucharon durante la sesión especial de ayer, la concejal hizo una perfecta síntesis que mixtura la gravedad del hecho, el contexto angustiante que atraviesa ese cuerpo deliberativo en general por los constantes papelones que allí se observan y ahora el escándalo de Pablo López; todo ello con una vergüenza ajena perfectamente comprensible.
“Me cuesta hablar porque siento vergüenza. Otra vez tenemos que hablar de un escándalo político en vez de hablar de los problemas reales de los salteños”, expresó la funcionaria.
En un punto su reflexión hizo foco en la escasa credibilidad que a la política argentina y local le queda como escaso margen. “Después no nos sorprendamos cuando la gente no quiere votar o cuando dicen que están hartos de la política”, reflexionó.
“Yo voy a seguir trabajando para que las cosas cambien. Pero a los que buscan un cargo solo para tener impunidad: den un paso al costado. La gente no se banca más a los vivos de siempre”, enfatizó.
