La clasificación del Gran Premio de España de la Fórmula 1 no fue de la mejor manera para Franco Colapinto. Quedó eliminado en la Q1, producto de una falla en el monoplaza de Alpine y largará desde el puesto 19 de la parrilla, solamente por delante del piloto de Red Bull, Yuki Tsunoda. El argentino se mostró muy frustrado al momento del desperfecto y mantuvo una intranquila conversación por radio con el ingeniero Stuart Barlow.
La enorme decepción ante la calamitosa falta de presupuesto del equipo de Franco solo deja una pregunta flotando en el aire: ¿Qué espera el gobierno francés para darle unos cuantos fajos de euros a don Flavio para que su equipo deje de hacer estos papelones?
Atrás y muy lejos en el tiempo quedaron aquellos poderosos Renault turbo amarillos pilotados por el profesor Alan Prost, Jean-Pierre Jabouille y René Arnoux; o más aquí en el tiempo la cantidad de títulos mundiales que se llevó el motor de la casa francesa trabajando con escuderías como Williams. Todos esos años de gloria quedaron atrás y ahora solo son un bonito recuerdo de una época muy lejana.
“Apaga y detente lo mejor que puedas. Lo siento, amigo”
Al día de hoy Alpine es fantasma que deambula entre los últimos lugares y allí anda penando nuestro Franco Colapinto, el mártir de este papelón del que participan Flavio Briatore y un equipo de ingenieros que no pueden darle al pilarense ni siquiera la chance de salir a pista, tras una vuelta excepcional.
“Algo anda mal. Libero completamente el embrague y todavía estoy en neutral. Es como si no fuera a primera marcha, como tirar un eje o algo así”, se lo escuchó decir a Franco en su perfecto inglés y se supo de inmediato que la clasificación se había terminado para el argentino; a lo que Barlow le dijo: “Apaga. Apaga y detente lo mejor que puedas. Lo siento, amigo”.
Luego, el bonaerense expresó “Por el amor de Dios”, mientras daba unos pequeños golpes, tanto al volante como al automóvil. El último mensaje del ingeniero fue que se detenga en el lado derecho. Desde allí, el piloto salió cabizbajo por el infortunio y la imposibilidad de continuar con la clasificación. Como consecuencia de semejante desatino, Franco partirá desde el penúltimo lugar.
