Este 1 de mayo se cumplen exactamente 8 años de que Ricardo Adrián Gerónimo fue baleado al llegar a su casa, siendo trasladado luego al hospital, donde sicarios intentaron ingresar para consumar el crimen. Cinco días después, el 6 de mayo, Raúl Fernando Martínez fue asesinado a tiros mientras esperaba su pedido en un puesto de comida. Dos crímenes por los que el violento narco tendrá que responder a la Justicia
Comienzan a conocerse detalles escabrosos de los crímenes del célebre narco Cristian “Gringo” Palavecino. Los objetivos fueron Ricardo Adrián Gerónimo y Raúl Fernando Martínez, ambos delitos serán materia de un debate oral y público, el cual a solicitud de la Unidad Fiscal de Litigio Estratégico contra el Crimen Organizado del Norte y en el marco de una audiencia flexible y multipropósito a cargo del juez de Garantías N.º 1 de Orán, Francisco Oyarzú, se resolvió la elevación de la causa a juicio.
La imputación de Palavecino es en carácter de coautor del homicidio en grado de tentativa en perjuicio de Adrián Gerónimo y por el homicidio consumado de Raúl Martínez, ocurridos en mayo de 2017 en la ciudad de Orán.
El primer hecho ocurrió el 1 de mayo de 2017, cuando Ricardo Adrián Gerónimo regresaba a su vivienda, ubicada en Pasaje Las Tipas 1667, en su vehículo particular. Al descender del mismo, mientras abría el portón de la casa, se le acercó una persona que sacó un arma de fuego de entre sus prendas y le disparó varias veces a la altura del estómago, retirándose en un automóvil conducido por otro sujeto, en dirección al centro de la ciudad. Luego del hecho, la víctima se trasladó por sus propios medios al hospital local, lugar al que sicarios intentaron ingresar simulando ser familiares, con el objetivo de consumar el delito.
El segundo hecho ocurrió cinco días después, el 6 de mayo de 2017, alrededor de las 21 horas, cuando Raúl Fernando Martínez se dirigió junto a su esposa e hija a un puesto de comida ubicado en avenida Esquiú, en la intersección con calle Alvarado. Mientras se encontraba esperando su pedido, se le acercó un hombre que descendió de una motocicleta conducida por otra persona y, desde corta distancia, le efectuó varios disparos con un arma de fuego en la zona de la cara, el cuello y el torso, ocasionándole la muerte.
En el marco de la investigación y mediante una intervención telefónica autorizada por el Juzgado de Garantías 3 de Salta, se descubrió que ambos hechos fueron encargados por Raúl Ricardo Rojas, alias “Coya”, quien se encontraba cumpliendo una condena por transporte de estupefacientes en un establecimiento de detención de Cerrillos. Junto a Enzo Quiroga y Matías Sarmiento, contactaron al sicario Norberto Mendoza para ejecutar a Gerónimo y Martínez, a quienes acusaban de “mejicanear” drogas y dinero.
De la intervención mencionada surgió que, ante el fallido intento de dar muerte a Gerónimo, quienes lo contrataron le exigían que fuera al hospital a terminar con el trabajo, y por tal motivo, Cristian Palavecino optó por buscar sicarios de la provincia de Tucumán para terminar con la vida de Raúl Martínez.