Jorge Bergoglio falleció a los 88 años. Ayer reapareció en la Plaza San Pedro ante una multitud. Su papado transformó a la Iglesia Católica, con una prédica de austeridad y apertura. Todas las portadas del mundo reflejan la triste noticia.
El sacerdote que salió del barrio de Flores y llegó a ser papa murió a las 7:35 hora italiana en su residencia de la Casa Santa Marta. Así lo anunció en un video el camarlengo, cardenal Kevin Joseph Farrel. “Con profundo dolor tengo que anunciar que el papa Francisco ha muerto a las 7.35 horas de hoy, el obispo de Roma ha vuelto a la casa del padre, su vida entera ha estado dedicada servicio del Señor y de su Iglesia y nos ha enseñado el valor del evangelio con fidelidad, valor y amor universal y en manera particular a favor de los más pobres y marginados”, dijo al revelar la muerte del papa argentino.
Según informó el Vaticano, sus últimos días estuvieron marcados por un progresivo deterioro de su salud, que incluyó dos episodios de insuficiencia respiratoria aguda en horas recientes.
La Santa Sede detalló que esos episodios fueron provocados por una importante acumulación de mucosidad endobronquial. El cuadro se agravó desde su internación el pasado 14 de febrero, cuando fue hospitalizado con una neumonía bilateral que derivó en crisis respiratorias, insuficiencia renal y una infección polimicrobiana. Durante ese tiempo, recibió transfusiones de sangre por anemia y asistencia respiratoria con oxígeno.